El aluminio es un material muy estable y ligero con muchas cualidades que permiten obtener soluciones de embalaje climáticas para evitar daños causados por la humedad, la temperatura, la estática y otros factores ambientales que podrían dañar o alterar las características de los productos que contiene.

Actualmente existe una gran variedad de embalajes de aluminio que han sido desarrollados y diseñados de acuerdo a las necesidades de cada sector, todo tipo de envases de aluminio, desde contenedores flexibles hasta bolsas y revestimiento para uso doméstico pasando por una amplia gama de productos que brindan protección climática completa, que garantiza mantener la calidad de los productos intacta e inalterable desde su almacenamiento hasta su destino final.

El aluminio soporta variaciones climáticas manteniéndose intacto e inalterable, las bolsas de aluminio son totalmente aislantes por lo cual son ideales para el almacenamiento apropiado de alimentos y fármacos ya que evitan su deterioro por factores ambientales como exposiciones a la luz, al calor o bajas temperaturas, emanaciones de gas, humedad y otros.

El embalaje farmaceutico debe conservar intacto el producto, es muy importante que el oxígeno no ingrese al envase ya que algunas sustancias podrían oxidarse y alterar sus cualidades, los envases de aluminio evitan todo tipo de deterioro ocasionado por agentes como el oxígeno y la humedad gracias a sus propiedades impermeables lo cual garantiza también protección contra la corrosion.

Algunos envases de aluminio cuentan con etiquetas de monitorización de alta precisión especialmente diseñadas para que el embalaje no se vea afectado temperaturas extremas durante su almacenamiento o transporte; estas etiquetas se fijan al embalaje para asegurar una manipulación cuidadosa de los productos de este modo se garantiza su calidad. Las etiquetas de monitorización, son ideales para productos farmaceuticos y aplicaciones electrónicas.

La cualidad impermeable de los embalajes de aluminio brinda protección contra el oxígeno y vapor de agua evitando el crecimiento de hongos, moho y otros microorganismo que podrían alterar los productos, además mantiene intacto su color y sabor, algunos de estos envases permiten el almacenamiento a la intemperie, por lo que son muy utilizados con alimentos secos o en polvo, saborizantes, colorantes, pigmentos, tinturas y otros aditamentos.

Los embalajes de aluminio cuentan también con dispositivos que evitan que el producto sea manipulado inadecuadamente gracias a indicadores que cambian de color si el embalaje no se mantuvo en la posición en la que debía permanecer o si el embalaje fue manipulado bruscamente, garantizando en todo momento la integridad de los productos.

Otra cualidad muy importante del aluminio es que este es un producto muy higiénico y esto se ve reflejado en su enorme utilización doméstica. Su superficie lisa y completamente impermeable puede limpiarse fácilmente y no permite la penetración de olores ni bacterias en los productos que recubre, además su fácil plegado permite una manipulación sencilla.

Finalmente el aluminio es un material íntegramente reciclable que puede fundirse y reutilizarse por lo que los envases de aluminio tienen una significativa contribución en la tarea de la reducción de residuos.

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